“En un contexto altamente inflacionario, en el que perdimos casi 20 puntos en la carrera entre salario y escalada de los precios en lo que va del año, necesitamos una urgente e impostergable recomposición salarial«, expresó Gerardo Bernardi, Secretario General de SADOP Seccional CÓRDOBA.
El gremio sostiene que el 30% acordado para el primer semestre dejará al poder adquisitivo del salario 20% por debajo del índice inflacionario, el que según estiman los especialistas terminará casi rondando el 50% concluido el mes de julio.
Y afirma que si se compara el salario de bolsillo del docente recién iniciado, que es de $84.000, con el valor de la canasta básica tipo II (para un matrimonio con 2 hijos en edad escolar) medida por el Centro de Almaceneros y afines de Córdoba, que es de $110.000, un docente en la provincia de Córdoba está $26.000 por debajo de la línea de la pobreza.
«En esta dinámica inflacionaria mensual de casi 7 puntos de promedio en los primeros 7 meses del año, los únicos que la pasamos mal somos los asalariados, porque tanto al gobierno provincial como a los empleadores de la educación privada les está yendo más que bien con sus recaudaciones», manifestó el gremialista.
“El gobierno debe ponerse los pantalones largos y debe intervenir fuertemente para limitar la voracidad empresaria en relación a sus abusivos márgenes de ganancias y asegurar una mayor justicia distributiva de los ingresos. En este sentido y en relación a lo que nos toca, no está nada bien que haya escuelas ricas con docentes pobres», sentenció Bernardi.